miércoles, 7 de agosto de 2013

069

Agra, India, 2011

Ejercicio: mirar la imagen durante cinco segundos mientras avanza el slide en el portarretratos digital.
Me moví para decir “Hello” por el hueco de la escalera y pedir que nos trajeran la cuenta. Al regresar la encontré con esta expresión. Pude hacer la fotografía sin que se diera cuenta. En la mesa le pregunté en qué pensaba. Me dijo que miraba el Taj Majal (estaba a unos trescientos metros) y se preguntaba qué podría haber pasado para que ese edificio tan impresionante estuviera rodeado de tanta pobreza, cómo es que con todos los turistas que venían no habían arreglado la zona. Y sí, la verdad es que por allí todo estaba bastante hecho polvo. Trastos, basura, casitas cayéndose, una copia de los barrios marginales de cualquier parte del mundo pobre. Pero en una azotea, sólo en una, alguien puso una cama para soñar su noche con los ojos abiertos fijos en lo que, probablemente, sea el edificio más oníricamente hermoso del mundo.

1 comentario:

Elmer dijo...

Ese si que es tremendo perfil.